P. Según su informe, la capital de España mantiene una caída del consumo en diciembre del -52,2% con respecto a los datos del mismo mes de 2019 y un porcentaje similar al -54% registrado en noviembre… algo que preocupa mucho. ¿Cree que estos datos son un reflejo del sentir de la economía a nivel nacional?

R. Es cierto que Madrid es un buen termómetro para entender un poco cuáles pudieran ser las consecuencias de lo que está sucediendo en España en este momento, porque, no en vano, es la capital de Europa más centralizada geográficamente y la ciudad española donde más españoles acuden de visita y de compras. Al fijarnos en el Índice TrueBroker (iTB) General de Madrid, si analizamos en detalle los demás iTB que estudiamos (Zona Centro Local, Zona Centro Turística, Barrios Singulares, Zonas de Oficinas…) veréis que en diciembre tuvimos en Madrid una caída promedio del 52%, mientras que en las Zonas Residenciales fue un 80%, frente al 32% en los Barrios Singulares. Por tanto, como estamos viendo, ya dentro de Madrid hay unas grandes diferencias con respecto a ese promedio. Esto sucede con las demás ciudades de España. Habrá ciudades que, con respecto a ese promedio que manejamos en Madrid, estarán mejor y otras no tan bien.

Por tanto, sirve para entender la tendencia, pero sobre todo sirve para entender algo nuevo en la gestión del mundo del retail, del comercio, del consumo y de la toma de decisiones, y son las grandes diferencias que hay entre países, regiones, ciudades, barrios y calles y, por lo tanto, es muy importante empezar a conocer el comportamiento y lo que sucede dentro de cada zona de cada ciudad para tomar decisiones de forma específica, un poco como microcirugía.

P. También dice que las oficinas poco a poco vuelven a la normalidad…  pero la realidad es que estamos ante una tercera ola… estamos también ante un retroceso de sus predicciones… ¿No conseguiremos volver en el 2021 a las oficinas?

En nuestra opinión, las oficinas andan muy lejos de poder decir que han regresado a la normalidad. Lo que sí señalamos es que el consumo en estas zonas ha pasado de tener una caída del 84% a una caída del 60%, lo que es todavía altísimo (de las más altas de Madrid), pero ya han iniciado una tendencia a tener una cierta recuperación, es decir, nos está mostrando que en diciembre hubo un aumento del tránsito de personas en las oficinas, pero aún lejos de esa normalidad. Normalidad que además, por otro lado, creo que debemos olvidar, porque ya antes del Covid nuestra sociedad y el consumo estaba camino de una verdadera transformación, donde ya entonces lo que vivíamos como “normalidad” estaba muy lejos de lo que conocíamos hacía un año. No volveremos a esa “normalidad”, sino a otros escenarios que crearemos, que aún no sabemos cuáles son y que tenemos que descubrir.

Por tanto, las oficinas de ningún sector volverán a la normalidad del pasado, porque, como decimos, antes de la Pandemia, nuestra sociedad de consumo estaba atravesando una transformación muy grande.

P. Por otro lado, vemos proliferar centros de coworking por toda la capital, esto avala aún más que el trabajo en esta nueva era digital pasa por teletrabajar y usar estos centros de forma ocasional. ¿Cómo se comportará estos centros de coworking?

R. Nosotros creemos, sin ser expertos en oficinas (ya que nos hemos especializado en retail, por lo tanto, lo que opinamos a este respecto hay que tomarlo con cuidado), es que el crecimiento tan grande del coworking es más una búsqueda hacia delante por parte del sector, de innovar y buscar nuevas fórmulas, que se adaptan muy bien a una sociedad en la que hay cada vez más autónomos, mas freelance, más profesionales que de forma independiente contratan servicios con empresas. Esto implica una mayor flexibilidad del trabajo, y por tanto, para mí, los coworking son un reflejo de esta flexibilidad mayor en el trabajo. No obstante, no creo que el teletrabajo haya venido para quedarse. Ocupará una cierta proporción en nuestra vida, tendremos alguna reunión más que antes de forma telemática, habrá algún viaje que no se hará porque habrá una videoconferencia, pero creo que el teletrabajo no será lo que todos esperamos de él. Creo que los ERTES van a causar, junto con el teletrabajo, la desaparición de la mayoría de las empresas que hayan aplicado las dos fórmulas, porque el ERTE rompe la relación de complicidad de los empleados con la empresa y con sus valores, y el teletrabajo está rompiendo esas mismas relaciones cómplices entre la empresa y el cliente. Estamos viendo, cómo empresas que han invertido millones en digitalización, sin embargo, durante el Covid con el teletrabajo, no están respondiendo ni a los e-mail, ni a los fijos, ni a los móviles, y está costando mucho llegar a ellas. Un porcentaje altísimo de estas empresas, que están aplicando por igual el ERTE y el teletrabajo, van a estar condenadas al cierre, porque no se están dando cuenta que están rompiendo las relaciones humanas de complicidad que lleva tantos años construir, que son estratégicas y la parte más importante del negocio, y que no se van a poder recuperar tan fácilmente; mientras otras, que han permanecido sin hacer ERTE o sin hacer teletrabajo, o haciéndolo en menor cantidad, sí habrán estado ahí para sus clientes, y estarán ganando cuota de mercado.

Los ciudadanos estamos contrayéndonos de forma muy rápida, pero también estamos de forma muy rápida expandiéndonos. En los meses de junio y julio vimos reacciones en algunos sitios de tendencia de recuperación muy rápida, en incluso  con algún punto.

Por tanto, creo que el teletrabajo y el ERTE, cada uno de ellos, van a ser responsables de, tal vez, un 3% más de tasa de paro. Creo que debemos replantearnos muy seriamente el tema de los ERTES; esto de pagar por no trabajar es un mal mensaje a esta sociedad. Tenemos que entender, como dice el Índice TrueBroker, cuánto pesan las oficinas en el consumo de Madrid. Es muy importante que las empresas entendamos que tenemos una responsabilidad social, que tenemos que hacer un gran esfuerzo para ayudar a que los trabajadores vuelvan físicamente a las oficinas con la mayor seguridad posible, y pasen el mayor tiempo en ellas, porque los propios trabajadores, los propios seres humanos, necesitamos del contacto humano con otras personas. Si el ser humano se aísla físicamente del resto, enloquece y le entra la neurosis. Estoy viendo un aumento muy grande de agresividad en la sociedad, que tiene mucho que ver con el aislamiento social, que la tecnología y el teletrabajo provoca, y que ya está causando un mal irreparable en muchas empresas.

P. Mucha gente dice que no cierran Madrid y en consecuencia el resto de España por la evolución de las elecciones en Cataluña, ¿usted cree que esto puede ser un elemento a tener en cuenta y cuál es su valoración si el cierre de Madrid , la capital de España, se produjera a nivel negocio?

La verdad es que he de reconocer que no quisiera encontrarme en estos momentos de la historia siendo un político relevante que tuviera que estar tomando decisiones, porque la situación a la que se enfrente la clase política es realmente muy compleja. Igual que ellos necesitan conciliar entre ellos, la sociedad también necesitamos conciliar con la clase política y empezar a ayudarles, ser comprensivos y tener alguna palabra cariñosa, porque están sufriendo tensiones muy importantes, teniendo que tomar decisiones que no son las que les gustaría y, como todos los que tenemos que tomar decisiones en situaciones tan difíciles, nos vamos a equivocar hagamos lo que hagamos y en muchas ocasiones no habrá una solución idónea.

Ya vimos en el mes de octubre el efecto que tiene un cierre, con una pequeña mala noticia y con una cierta confrontación política, que llevó al retroceso del consumo en Madrid, después de la recuperación que habíamos hecho lentamente durante 3 meses.

Pero quiero poner el foco en que, igual que los ciudadanos estamos de forma muy rápida contrayéndonos, también estamos de forma muy rápida expandiéndonos, es decir, en los meses de junio y julio vimos reacciones en algunos sitios de tendencia de recuperación muy rápida, en incluso en algunos meses con algún punto positivo en algún lugar. Estoy con los ojos puestos, más que en la política y en las elecciones, en las noticias positivas que hemos tenido. A pesar de que creamos que no lo es, todo esto de las vacunas es algo positivo, y van a ir llegando otras noticias positivas, que tienen el mismo efecto contrario al negativo que tiene una mala noticia. Estoy seguro que en cuanto empecemos a tener algún dato positivo y se consolide en algún otro país, además de España, la recuperación del consumo va a ser muy rápida, y posiblemente con un rebote.

Quiero poner más el ojo en qué tenemos que hacer para tener un rebote en positivo. Yo no pondría el foco en la política, hay que dejarles tranquilos con sus decisiones y ayudarles. Hemos de poner el foco en las cosas positivas: los avances de las vacunas, la vacuna española, un medicamento español siete veces más potente…

Creo que debemos tener un poco de templanza y paciencia, tenemos que cumplir otro tramo de tres meses, y seguir avanzando en este camino. Estoy seguro de que para verano o septiembre de 2021 estaremos en una situación mucho mejor que la que tenemos ahora mismo.

P. Utiliza la IA para hacer su informe…. Como se desarrolla podría decirnos algo más de la toma de datos, su utilización y seguridad de los mismos.

El Índice TrueBroker (iTB) es un modelo matemático, consecuencia de un departamento de investigación que lleva desde el año 2012 midiendo en todas las calles de Madrid el comportamiento de las personas y de los consumidores (que son dos cosas distintas), 12 horas al día, 7 días a la semana y 12 meses al año. Tiene un importante físico matemático al frente del proyecto, una directora del departamento de investigación, con unos protocolos muy rigurosos, desde la propia toma de datos a pie de calle a su manejo, manipulación y análisis. El análisis matemático cuenta además con la visión de un departamento, que lleva desde el 2012 midiendo y estudiando por todo el mundo el comportamiento de la conducta y la mente humana. Es un índice matemático que contiene en sí una lectura mucho más amplia de lo que pudiera ser una inteligencia artificial, donde estamos teniendo muy en cuenta el conocimiento de los seres humanos. Estamos dando datos de unos índices generales, pero en realidad cada manzana de cada ciudad tiene un índice distinto, y los índices que manzana que estamos midiendo son quirúrgicamente precisos. Nos están permitiendo medir otras cosas a parte del consumo: cómo afecta al ser humano la apertura o el cierre de un negocio, qué elementos hacen que aumente o disminuya el consumo en una zona para detectar qué actuaciones se están produciendo, que van a conllevar una caída o un aumento del valor de los inmuebles y del consumo, medir en tiempo real y ver cuáles son las calles que están cayendo y cuáles las nuevas calles protagonistas emergentes a las que están acudiendo los madrileños y dónde se está desplazando el consumo.

El Índice TrueBroker (iTB) tiene una capacidad que va más allá de los meros números matemáticos, ya que cuenta con el conocimiento de la psique, del comportamiento, de la parte antropológica e histórica del ser humano, y nos permite entender qué cosas son las que nos afectan, en cada barrio en la ciudad de Madrid, y cómo eso se traduce de una forma distinta al consumo, teniendo el iTB una gran precisión. Además, nos ha hecho darnos cuenta de que estábamos equivocados en cosas que creíamos ciertas y hemos descubierto cosas preciosas que no nos podíamos imaginar. Hemos medido cómo las aperturas sociales de grandes locales comerciales (como han sido en el pasado Primark, Zara, H&M), han afectado en uno u otro sentido al consumo en la calle de los vecinos.

P. Por último y alejándonos del tema pandemia, ¿Cuál es el futuro de ciudades como Madrid, cómo evolucionarán? ¿Qué debería hacer el sector retail para cuando todo esto acabe a la hora de invertir en inmobiliaria?

R. En la gráfica que mostramos, categorizamos los distintos perfiles de consumidores que hay (A, B, C y D), y como consecuencia del fin de la Era Global aparecieron dos nuevos (canal on-line y Z). Estas categorías, al fin y al cabo, categorizan consumidores, y por lo tanto sirven para categorizar los países, las ciudades, las regiones, los barrios, las calles y los centros comerciales. No hay que esperar a que termine la pandemia para invertir, hay que empezar a actuar ya, porque como vemos en la gráfica, las zonas C y D van a desaparecer o perder su valor (algo que llevamos diciendo desde antes del Covid), y por tanto hay que sacar urgentemente las inversiones de estas zonas y trasladarlo a estas nuevas calles, que hemos bautizado como Z, que van a ser las nuevas grandes protagonistas del consumo. Gracias a nuestras mediciones del iTB hemos detectado cuáles son estas calles Z, a las que se está desplazando y acudiendo el consumidor.

Por otro lado creemos que Madrid puede ser una ciudad Z, es decir, creemos firmemente que puede ser la gran protagonista del crecimiento económico de Europa de la próxima década. Creemos que es el momento de invertir en Madrid y tomar posiciones inmobiliarias en las carteras, reubicando las inversiones de un sitio a otro.

Por último diría que Madrid ha adquirido en este nuevo cambio, que ya vivíamos antes del Covid, una sociedad que está cabalgando de buscar la felicidad en el tener (por eso valoraba tanto las marcas, la moda y los productos físicos y tangibles) a una sociedad que claramente está camino de buscar la felicidad en el ser, razón por la que están creciendo mucho todas aquellas industrias que son capaces de monetizar intangibles. Ya no va de producto físico, sino de valores. Creemos que Madrid se ha convertido en una herramienta estratégica de comunicación, porque en la mente de más de 1.000MM de personas está asociada con un valor aspiracional, que es el que tiene España. Creemos que Madrid (como mayor representante de lo español y liderando la presentación de España en el panorama internacional) representa la felicidad de las cosas sencillas de la vida, que para nosotros es el nuevo lujo, el bienestar personal. Creemos que esa es la actividad económica que más va a crecer y creemos que Madrid está muy alineado en todo eso.

Madrid tiene ante sí la oportunidad de ser la gran protagonista de Europa, por eso hemos creado “Apostamos por Madrid” y el proyecto “serranodistinto” para el Barrio de Salamanca, para atraer aquí a todas aquellas empresas que quieran innovar de alguna forma, para convertir este barrio en un hup de la innovación, y a la ciudad de Madrid en una herramienta para ellos de comunicación estratégica, que los asocie en la mente de los seres humanos con intangibles.